El viaje
VIII EL VIAJE La vida es el viaje. Siempre vamos poniendo el pie delante avanzar y correr sin detenernos hasta en el mas profundo sueño vamos cayendo hacia ninguna parte. Pero sucede a veces que este viaje resulta interminable. Entonces, quién pudiera como la mariposa tener las horas calculadas tan poco tiempo para no hacer planes ni regar la semilla del deseo. Dardos azules como una mirada triste como algunas palabras gota de néctar que apenas alcanza. No hay caída No hay subida No hay huida posible. Sólo estamos expuestos al instante presente al instante profundo. Quién pudiera medir la intensidad del tiempo y socorrer al hombre que siempre va cayendo. Somos, en la caída, lo mismo que la pluma Sólo un objeto solo golpeado desde adentro. Frágil motor de vida. Impulso i